Hemos recibido muchas imágenes en estos días, y que iremos publicando, y cada una servirá para enriquecer nuestro patrimonio gráfico y archivo de la Hermandad. Pero en esta ocasión hemos querido traer esta imagen, por su belleza, por su sencillez, porque evoca contarle nuestras preocupaciones, o simplemente rezarle.
ORACION AL SANTÍSIMO CRISTO DE LA BUENA MUERTE:
Adorable Redentor, que en este leño sagrado,
sufristeis la muerte más humillante.
Venero con todo corazón vuestra pasión sacrosanta
y os reconozco por ejemplar perfectísimo.
De toda virtud heroica;
De la humildad más profunda;
De la obediencia más rendida;
De la resignación más entera;
De la dulzura más constante;
De la paciencia más sufrida;
De la caridad más ardiente;
De la pureza más divina.
Desde esa altura me enseñáis las verdades de la salvación y los principios de la eterna sabiduría.
Ahí, donde la misericordia y la justicia se unieron para darse el ósculo de paz, hallan refugio los pecadores; entrada los penitentes; sostén los justos; consuelo los afligidos y la muerte más preciosa los verdaderos cristianos.
Que yo aprenda la soberana lección de este día y jamás me descarríe de la cátedra sagrada donde yacéis enclavado de amor perenne por mí. AMÉN.