En la mañana del sábado, a las 10:00 de la mañana exactamente, se abrieron las puertas de San Julián a todos los hermanos y devotos que otro año más pudieron disfrutar de la Veneración a María Santísima de la Hiniesta Dolorosa, que lucía espectacularmente vestida por D. Antonio Bejarano. Como en anteriores ocasiones, el grupo de Priostía de la Hermandad dispuso de un altar muy trabajado y con muchos detalles, donde todo el protagonismo era para la Santísima Virgen.
Antes de terminar la jornada del sábado, celebramos Misa de Hermandad y sabatina, donde con la iglesia a rebosar, tuvimos la enorme satisfacción de poder recibir como nuevos hermanos a 22 jóvenes, terminando dicho día con la vigilia nocturna ante la Santísima Virgen del grupo joven, guiados por el Rvo. Padre D. Miguel Canino Zanoletty, y en el que cada pequeño pudo depositar bajo el manto de la Virgen todos sus buenos propósitos y oraciones.
Una vez terminada la Santa Misa, se procedió a la bendición de la nueva casulla de terciopelo morada para la Hermandad. Nuestro hermano Sebastián Cerrillo ha donado el diseño y pintura al óleo del escudo que luce en el pecho dicha casulla.
Durante la jornada del domingo, desde las 10,00 de la mañana hasta el cierre, hubo un incesante transcurrir de hermanos y devotos ante la Santísima Virgen. Igualmente, agradecer a las Hermandades que dejaron su ofrenda florar a los pies de la Virgen de la Hiniesta.
Por último, y tras el rezo del Santo Rosario, varios miembros de la Junta de gobierno acompañado por algunos hermanos, procedieron a depositar las flores que ha lucido a cada lado la Santísima Virgen en la Veneración, en el columbario donde descansan nuestros hermanos difuntos.